Vida 2ª parte

Como os comentaba, ya en Blasco Ibáñez fuerón tiempos de luces y sombras, vidas escondidas en la apariencia y en el miedo hacia un padre al cual por desgracia quiere. Pese a su corta edad recuerda ciertos maltratos a la su madre y su enamoramiento hacia ella. Odio y amo a mi madre!, de pequeño me la quería fxxxx me comentaba histriónicamente el muy canalla. No hay orden, hay caos, miserias personales, sexo y redenciones decía en voz muy baja mientras se tomaba su café en un sitio céntrico de la ciudad. Veraneaban en un pueblecito de pescadores cercano a la ciudad, donde su padre pasaba consulta a los pacientes y a las pacientes. Su padre era un bello señor de pose aristocrática y de belleza excepcional. Sus conquistas traspasaban fronteras y aún hoy en dia es muy respetado y querido por todo el mundo. Realmente es un señor en todos los aspectos excepto en el familiar donde se mostraba como el más vil de los tiranos, un ser despótico y violento como pocos, aunque con excesivo cariño hacia sus hijos, un cariño traumático que nos transmitió por su niñez. Una niñez que aún hoy en dia para mi es un misterio, me decía ya Don Ricardo con cara de enfado quizás por los recuerdos y vivencias pasadas. Los veranos eran largos y sumamente agradables donde jugaba con los niños a los ya clásicos "Clicks" de Playmobil y otros juguetes de la época. Durante esa época conoció a sus dos grandes amigos de la infancia a Nacho y a su hermana María, hoy ya María prácticamente no existe por desavenencias o por circunstancias de la vida. Con el tiempo fuerón formando una gran pandilla de amiguitos donde entraron Jorge y su hermano Borja, que tiempos aquellos de niñez!, exclamaba Don Ricardo. Durante esa época iban a limpiar a su casa varias chicas, a las cuales pese a su corta edad tenia enamoradas, y con las cuales, con varias hubo más que palabras. Don Ricardo es alguien especial bendecido con una belleza muy particular, su cara no la olvidas fácilmente, es como una cara pasada por las culturas clásicas, Grecia, roma, Egipto. Dicen que su cara es un cumulo de rasgos y expresiones muy marcadas. Lo de sus cuidadoras se sale de lo normal, unas niñeras enamoradas de un niño en el sentido medio perverso de la palabra. Un dia con una de ellas mientras su padre pasaba consulta el le pidió que se bajase la falda y dejase que le tocase el coño, a lo cual ella inmediatamente accedió. El era muy pequeño, 8 o 9 años pero ya sabia lo que eran ciertos placeres de la vida por un ritual que ocurrió una noche de verano y que el fue el implicado. Magia blanca o negra nunca lo sabrá, pero lo cierto es que sucedió.



Nota: Seguiré con la vida de Don Ricardo y contando lo que de verdad es su vida y su muerte pasada en vida.